Dos años maravillosos, pletóricos de actividades de formación y de innumerables iniciativas realizadas en el ámbito de la divulgación en RRSS y otros medios, en pro de sensibilizar acerca de los efectos del consumo de películas sexuales pornoviolentas en menores y su prevención. En este blog he dado cumplida cuenta de muchas de ellas.
Pretensión ésta, la de sensibilizar y formar a quien pueda interesarle, en la que invierto tiempo y entusiasmo a raudales. Que me inviten a compartir conocimientos, experiencias y reflexiones, me llena de satisfacción.
.

Por ejemplo, unas de las intervenciones más interesantes fue impartida, durante los días 23 y 26 de noviembre, fue organizada por el Ayuntamiento de Gáldar, una institución comprometida con el tema de las agresiones sexuales a mujeres y menores -con ocasión de la celebración del día internacional contra la violencia sobre las mujeres- consistiendo en un taller on line para "madres y padres vergonzosos", es decir para quienes les da corte hablar con sus hijos/as sobre sexualidad y pornografía.
Esta experiencia ha sido valorada muy positivamente y a mi me causó especial satisfacción volver a la formación en esa hermosa tierra –tan afectada por las dramáticas consecuencias del volcán en La Palma– con gentes amables y generosas, tierra que he visitado en multitud de ocasiones para impartir conferencias y talleres educativos para familias, profesionales y jóvenes, desde los años 80.
Me parece oportuno recordar que, el 24 de noviembre de 1990 , hace ya 31 años, con ocasión de una conferencia sobre el consumo de porno en jóvenes, el periódico CANARIAS-7 me hizo una amplia entrevista en toda la contraportada en la que resumía lo siguiente: Alguien tiene que hablar a nuestros hijos de pornografía. Ha pasado mucho tiempo y, lamentablemente, seguimos diciendo lo mismo.

En ese año, fui víctima de una furibunda campaña mediática y política por decir cosas como esa. Me congratuló con que, en la actualidad, mucha gente comienza a considerar las consecuencias del consumo de pornografía con dosis de violencia en nuestros jóvenes, manifestando opiniones similares.
Pero bien, esta iniciativa es solo una del conjunto de talleres y conferencias que hemos llevado a cabo en este año, francamente difícil, por la pandemia de la covid-19. Aun así pensamos que la formación de padres, madres y profesionales de la salud y de la educación, tanto en el área de la comunicación con sus hijos/as como en la educación sexual y afectiva, es un objetivo prioritario en el momento presente, a tenor de las necesidades que presentan estos grupos de población, relacionadas con los cambios acontecidos en la sociedad en las tres últimas décadas, particularmente la omnipresencia de la red.
He colaborado con varios Ayuntamientos, instituciones diversas, centros educativos o APYMAS con resultados muy positivos y valoraciones altamente satisfactorias. Reconozco que he aprendido mucho de todas ellas.
¿Tienes interés en conocer algunas de las iniciativas de carácter formativo más relevantes, organizadas por diferentes instituciones, que hemos realizado en este año? pues clica aquí
Parece claro que el acceso a internet ha provocado modificaciones espectaculares en nuestra vida, en nuestras relaciones y en la ocupación del tiempo libre. Los estudios científicos, los testimonios de personas y de profesionales, así como el incipiente debate social que se está produciendo, sugieren la magnitud de los problemas derivados del consumo de pornografía violenta en menores y jóvenes.
En muchas familias se constatan numerosas dificultades para afrontar estos cambios, sobre todo los derivados de la información sexual y el consumo de pornografía de niños/as y jóvenes.
La ausencia, en términos generales, de una formación específica en esta materia, ha hecho que los propios padres y madres, manifiestan a menudo encontrarse con serias dificultades en la comunicación sexual con sus hijos/as y también entre ellos sobre esta temática: les cuesta reconocer la realidad, pero, más aún, intervenir activamente y de manera adecuada.
Nos dicen que les da corte hablar de aquellos temas más polémicos: el placer sexual, las conductas sexuales o el porno, por ejemplo. Les da verguenza, de ahí el título de nuestro taller. Lo cierto es que el acceso a Internet, tanto en la gestión del tiempo navegando como en los contenidos, se ha “descontrolado” y muchos padres no saben qué hacer.
Por esa razón en estos talleres abordamos los principales riesgos sexuales de Internet: agresiones sexuales, el sexting, grooming, acoso sexual, citas inapropiadas, los abusos sexuales, la exposición a la prostitución y el consumo de pornografía violenta. Se analizan también algunas plataformas consideradas de elevado riesgo como TikTok y Onlyfans.
El consumo de porno en menores y jóvenes, en particular el violento, está generando numerosos problemas en sus actitudes y conductas, dando lugar a lo que nosotros hemos denominado: generación de #niñosyniñaspornográficos, término que hemos desarrollado en varias publicaciones y cuyo hashtag ha tenido una buena acogida en las RR SS.
Los últimos datos disponibles vuelven a indicar que, en las familias, las cuestiones relacionadas con la sexualidad, la pornografía o con el consumo de drogas o alcohol, son las que más interesan, pero a las que apenas se dedica tiempo y es poco frecuente la comunicación entre padres e hijos en estas materias.
Pues bien, la última iniciativa citada más arriba, ha tenido una excelente repercusión en los medios de comunicación canarios. Prueba de esto que decimos, la tienes en dos entrevistas que me han realizado sobre esta actividad, una en el programa de TV Buenos días Canarias (Clica aquí si quieres verla) y otra en la emisora de radio municipal del Ayuntamiento de Gáldar (Clica aquí) . No obstante, también puedes verlas en mi canal de Youtube en esta misma web.

En el próximo artículo hablaremos de algunas conclusiones y reflexiones de estas experiencias. Hasta pronto.